En Corrientes, el caso del doble homicidio ocurrido en el barrio Santa Teresita vuelve a estar en el centro de la escena judicial. A días del comienzo del juicio, familiares de las víctimas denunciaron graves agresiones y amenazas dirigidas a amedrantar a los testigos, incluyendo un intento de incendio y disparos contra una vivienda.
Durante la madrugada del 21 de enero de 2024, un grupo de personas fue atacado a tiros desde un automóvil en inmediaciones de la calle Madariaga, entre Castelli y Juan José Paso, en el barrio Santa Teresita. En el lugar murió Lucas “Hámster” Romero, mientras que cuatro personas resultaron gravemente heridas.
Días más tarde, se confirmó el segundo fallecimiento: Nahuel “Cachorro” Rodríguez, de 30 años, quien también había recibido múltiples disparos. La investigación reveló que Romero fue atacado con 17 balazos, cuatro de ellos en la cabeza.
Acusados y fecha de inicio del juicio
Por el doble homicidio, están imputados Alejandro “Osito” Alarcón, Verónica Elizabeth González, Jonathan Alejandro Alarcón y una cuarta persona que sería menor de edad al momento del hecho. El juicio comenzará este viernes, en un proceso clave para determinar responsabilidades en uno de los crímenes más violentos registrados en la zona.
Denuncian amenazas e incendios para intimidar a testigos
Claudia, hermana de Lucas Romero, denunció a una emisora local que la familia acusada está amenazando a testigos clave del juicio. Como prueba, aportó un video donde se observa a dos jóvenes intentando incendiar un kiosco, propiedad del padre de una testigo, mientras profieren amenazas.
Además, reveló que en los últimos días baleado el auto y la vivienda de la misma familia, con el objetivo de frenar las declaraciones previstas para la audiencia. Según la denuncia, uno de los responsables sería un joven identificado como M. A., quien permanece en libertad por haber sido menor de edad durante el ataque de enero.
Un conflicto previo que terminó en tragedia
Claudia explicó que la disputa entre su hermano y “Osito” Alarcón habría comenzado tras una pelea en la que Romero “ganó”. Sostuvo que esto derivó en una represalia por parte de “los Alarcón”, a quienes calificó como “mafiosos”, quienes presuntamente atacaron a quienes estaban reunidos en la vereda aquella madrugada.
También negó que su hermano tuviera antecedentes penales y exigió que los responsables reciban una condena justa, remarcando que la pena debería ser prisión perpetua.
