En el marco de la emergencia económica y financiera, la Municipalidad de Gobernador Virasoro, en la provincia de Corrientes, anunció una medida que generó fuerte repercusión entre los vecinos: las motocicletas secuestradas en operativos de tránsito que no sean retiradas por sus propietarios serán compactadas y vendidas como chatarra.
Desde el Ejecutivo local informaron que los rodados que permanecen en el depósito municipal y no sean reclamados dentro del plazo establecido perderán su condición de vehículos resguardados.
Una vez vencido ese período, las motocicletas serán compactadas y el material resultante se comercializará como metal reciclable, sin posibilidad de reclamo posterior por parte de los titulares.
El plazo para retirar los vehículos
Según se detalló oficialmente, los propietarios tendrán un plazo de 15 días desde la retención del rodado para presentarse y regularizar su situación.
Transcurridas esas dos semanas, el Municipio quedará habilitado para disponer de las motos secuestradas, avanzando con su venta como chatarra.
Emergencia económica y justificación oficial
El intendente Guillermo de la Cruz fundamentó la medida en la necesidad de optimizar recursos en un contexto financiero adverso. Desde el Municipio señalaron que la compactación permitirá liberar espacio, mejorar el ordenamiento urbano y obtener fondos a partir de la venta del material metálico.
La iniciativa forma parte de una serie de acciones orientadas a enfrentar la crisis económica que atraviesa la localidad.
Reacciones y debate en la comunidad
El anuncio generó un intenso debate en redes sociales. Mientras algunos vecinos respaldan la medida por considerar necesario el ordenamiento y la liberación de espacios públicos, otros cuestionan la brevedad del plazo otorgado a los propietarios y el destino final de los vehículos.
Por el momento, no se informó una fecha concreta para el inicio del proceso de compactación, aunque las autoridades reiteraron el llamado a regularizar la situación de los rodados retenidos.
