El Festival Nacional de la Papa, celebrado en Villa Dolores, Córdoba, se vio envuelto en la controversia cuando la reina saliente, Amira Oggas, denunció públicamente la falta de apoyo municipal durante su discurso de despedida. La situación generó tensión en el evento, dejando al descubierto problemas organizativos que impactaron en las participantes.
Amira Oggas, soberana saliente de la 33ª edición del festival, comenzó su discurso agradeciendo al público y, acto seguido, expresó su descontento con el manejo del evento por parte de la Municipalidad de Villa Dolores. Sin embargo, mientras exponía sus críticas, el locutor retiró el micrófono, generando silbidos e incomodidad entre los asistentes.
El gesto de la nueva soberana
La flamante reina, Milagros Buco Soto, reaccionó con empatía al gesto del locutor y ofreció el micrófono a su compañera para que pudiera concluir sus palabras. Este acto fue ovacionado por el público, destacando el espíritu solidario entre las participantes.
Las denuncias de la reina saliente
Oggas denunció numerosas irregularidades durante su mandato, entre ellas:
- Falta de apoyo logístico durante la elección.
- Ausencia de recursos básicos como comida y bebida en eventos.
- Gastos cubiertos por su coordinadora, Lara Sánchez, debido a la falta de financiamiento municipal.
- Negligencia por parte del secretario de Turismo, Ignacio Castro, y el intendente, Maximiliano Rivarola, en autorizar viajes y eventos importantes.
Impacto en la comunidad
El público presente mostró su apoyo a la reina saliente, destacando la necesidad de que los festivales cuenten con una organización adecuada y respeto hacia sus representantes. Este episodio ha reabierto el debate sobre el papel de las autoridades locales en la promoción y cuidado de eventos culturales.
