La ciudad correntina de Santa Lucía atraviesa una emergencia hídrica tras el desborde del río. Hasta el momento, 20 familias se encuentran evacuadas: 11 en el centro “Ara San Juan” y 9 alojadas en casas de familiares. Las autoridades municipales trabajan intensamente para asistir a los damnificados y contener los efectos de la crecida.
Luego de las intensas lluvias que afectaron la cuenca del río Santa Lucía, se registró un desborde que dejó múltiples barrios ribereños bajo agua. El nivel del río alcanzó los 3,48 metros, provocando serios anegamientos y el desplazamiento de al menos 20 familias.

Evacuados y asistencia municipal
En diálogo con El Litoral, el intendente Norberto Villordo confirmó que 11 familias siguen evacuadas en el centro Ara San Juan y que otras 9 se alojan en casas de familiares. Desde la Municipalidad de Santa Lucía se está brindando asistencia con mercaderías, abrigo y elementos de primera necesidad, en el marco de la ola de frío polar que afecta a la región.
“El centro Ara San Juan se encarga de coordinar la ayuda junto a nuestro equipo. Estamos haciendo todo lo posible para que las familias estén contenidas en este difícil momento”, aseguró Villordo.

Mejora paulatina del panorama
A pesar del escenario complejo, el intendente indicó que la situación comenzaría a mejorar en los próximos días. “Creemos que el nivel del agua comenzará a bajar a partir del jueves. El pico se estacionó en 3,60 metros a las 5:45 de la madrugada del miércoles, por lo que esperamos que en dos o tres días las familias puedan regresar a sus hogares”, dijo el jefe comunal.

Comité de crisis y tareas de prevención
El martes se activó el comité de crisis, encabezado por el intendente, y se realizó una conferencia de prensa para informar a la comunidad. “Queremos llevar tranquilidad a los santaluceños. Estamos trabajando para dar una respuesta inmediata y acompañar a las familias afectadas”, expresó Villordo.
Desde el municipio informaron que cuadrillas municipales recorren los barrios para relevar daños, liberar desagües y reforzar tareas de prevención. Además, se solicitó a la población evitar circular por zonas cercanas al cauce del río y mantenerse informada por los canales oficiales.
Contexto climático y advertencias
El desborde del río se produjo tras lluvias intensas en la cuenca que nace en la Laguna Iberá y atraviesa zonas como San Miguel, Saladas y San Roque. Si bien el nivel del río se estabilizó, las autoridades no descartan que aumente el número de damnificados, ya que siguen recibiéndose pedidos de asistencia.