En una sesión histórica, el Senado argentino expulsó al legislador Edgardo Kueider tras su detención en Paraguay por intentar ingresar al país con más de u$s200.000 sin declarar.
Con 60 votos a favor, el Senado decidió destituir a Edgardo Kueider, marcando un precedente en la historia democrática argentina. La iniciativa impulsada por Unión por la Patria argumentó que no era necesaria una investigación adicional debido a que el legislador fue encontrado in fraganti. El lugar de Kueider será ocupado por la kirchnerista Stefanía Cora, mientras su despacho permanece cerrado hasta que se esclarezca su situación judicial.
Detalles del caso
El incidente ocurrió en Paraguay, donde Kueider fue detenido al intentar cruzar la frontera con más de u$s200.000 sin declarar. Durante la sesión, 67 de los 72 senadores estuvieron presentes, logrando superar ampliamente los dos tercios necesarios para su expulsión. Una propuesta alternativa de La Libertad Avanza, que buscaba suspender al senador hasta el 1° de marzo, no consiguió el respaldo suficiente.
Ezequiel Atauche, jefe del bloque libertario, explicó el cambio de postura de su espacio: “No conseguimos los números para la suspensión, por lo que votaremos por la expulsión para evitar que el caso quede sin resolución”.
Posturas de los bloques políticos
La medida contó con el respaldo del peronismo, el radicalismo, y parte del PRO. Entre los opositores a la expulsión se encontraron algunos integrantes del PRO, la UCR y el bloque de Provincias Unidas, incluyendo al compañero de Kueider, Carlos Espínola.
La senadora Guadalupe Tagliaferri (PRO) expresó: “A Kueider lo echaremos a patadas, si es necesario, pero en el marco del debido proceso”. Por su parte, Carlos Espínola enfatizó que el senador debía asumir sus responsabilidades ante la Justicia.

Debate sobre ética y valores
La sesión también evidenció tensiones sobre los valores y la ética en el Senado. Eduardo Vischi, jefe del bloque de la UCR, afirmó: “Hoy no juzgamos derecho penal, sino los valores, la ética y el honor de este Senado”. La decisión unánime de avanzar en una sanción muestra la gravedad de las acusaciones y el compromiso del cuerpo legislativo con la transparencia.