Argentina exige la liberación inmediata del gendarme detenido en Venezuela

La detención de Nahuel Agustín Gallo, cabo primero de la Gendarmería Nacional Argentina, en Venezuela por el régimen de Nicolás Maduro, ha generado una crisis diplomática entre ambos países.

Nahuel Gallo, de 28 años, estaba de licencia y viajó a Venezuela para visitar a su pareja e hijo de dos años. Fue detenido el 8 de diciembre en el Puente Internacional Francisco de Paula Santander, en Táchira, cuando ingresaba al país. El régimen de Maduro lo acusa de ser un espía, pero tanto su familia como el gobierno argentino aseguran que se trataba de un viaje familiar.

Mensajes críticos hacia Maduro, ¿el detonante?

Según la pareja de Gallo, la detención ocurrió después de que las autoridades venezolanas revisaran su celular y encontraran mensajes críticos hacia el gobierno de Maduro. Uno de los mensajes decía:
“Nahuel, el país se está yendo a la mierda. Tenemos un Gobierno horrible. Tenemos una dictadura.”

Postura del gobierno argentino

La Cancillería y el Ministerio de Seguridad calificaron la detención como “arbitraria e injustificada”. Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, afirmó:
“Lo han tomado de rehén. Estamos trabajando con el canciller Gerardo Werthein para que cese este secuestro y pueda volver con su familia.”

Bullrich también rechazó las acusaciones de espionaje, calificándolas de “banales y absurdas”. Según la ministra, Gallo está retenido en una base de los Servicios de Inteligencia en Táchira, y Gendarmería Nacional presentó una denuncia penal contra el régimen venezolano.

Impacto diplomático y acciones en curso

La detención de Gallo agrava la tensión entre Argentina y Venezuela. El gobierno argentino explora vías diplomáticas con Colombia y Brasil para interceder ante Maduro y lograr la liberación del gendarme.