Los cardenales se reunieron en la Basílica de San Pedro para celebrar la misa Pro eligendo Pontifice, dando inicio formal al proceso de elección del nuevo Papa que sucederá a Francisco. La ceremonia fue presidida por el cardenal Giovanni Battista Re, decano del Colegio Cardenalicio.
La Basílica de San Pedro fue escenario este miércoles de la misa Pro eligendo Pontifice, una tradición que marca el inicio del proceso para elegir al nuevo Papa. Presidida por el cardenal Giovanni Battista Re, decano del Colegio Cardenalicio, la ceremonia reunió a 220 cardenales, tanto electores como no electores, además de obispos, religiosos y unos 5 mil fieles que se congregaron para orar por el próximo líder de la Iglesia Católica.
En su homilía, Re expresó un profundo mensaje sobre el significado del cónclave: “Que sea elegido el Papa que la Iglesia y la humanidad necesitan en este momento de la historia tan difícil y complejo”, destacando la importancia de poner a Dios en el centro de esta elección y de actuar con responsabilidad espiritual.
El cardenal también subrayó que el proceso es “un acto de la máxima responsabilidad humana y eclesial”, instando a los cardenales a dejar de lado cualquier interés personal y concentrarse únicamente en el bien de la Iglesia y de la humanidad.
El desafío de acrecentar la comunión
Durante su mensaje, el cardenal Re también habló sobre el desafío que enfrentará el futuro Papa, recordando que su misión será “acrecentar la comunión” no solo dentro de la Iglesia, sino también entre las personas, pueblos y culturas. “No una comunión autorreferencial, sino dirigida totalmente a la comunión entre las personas, los pueblos y las culturas”, agregó, destacando que la Iglesia debe ser siempre una “casa y escuela de comunión”.
Re finalizó su mensaje con una petición para que el nuevo Papa sea alguien que pueda “despertar las conciencias de todos y las fuerzas morales y espirituales en la sociedad actual”, haciendo referencia a un mundo cada vez más tecnificado pero que tiende a olvidar a Dios.
El inicio del Cónclave
Después de la misa, los cardenales electores se reunirán a las 16:30 en la Capilla Paulina del Palacio Apostólico para iniciar la procesión solemne hacia la Capilla Sixtina, donde se llevará a cabo el cónclave. Una vez dentro, el monseñor Diego Ravelli pronunciará el tradicional “Extra omnes” (fuera todos), ordenando la salida de todas las personas ajenas al cónclave y procediendo al cierre de las puertas, marcando el inicio formal del proceso de votación.
